Tradición de la leche cocida / Cooked milk tradition

Tradición de la leche cocida

Llevo ya varios días en Huajicori y mis primos me llevaron a unas aguas termales. De regreso, me dice mi prima Alondra, “mira ahí está la tía Domitila”. Uy tenía desde que murió mi madre que no la veía. Es una prima de mi mamá. Nos bajamos del coche, fue un encuentro de lágrimas, risa, felicidad, nostalgia, abrazos y muchos recuerdos agolpándose.

Después de ese momento, ya saben, la cocina salió a flote y le pregunté si sabía hacer la leche cocida, porque la mamá de un amigo que es de Tecuala me había hablado de ella y en la reunión con la maestra una señora me había relatado lo siguiente:

La leche cocida es una tradición de los herraderos. Común en el mes de octubre, cuando las vacas dieron a luz, hay pasto de buena calidad después de las lluvias y la leche abunda. Como festejo de abundancia se hace la “fiesta de los herraderos”. La tradición marca que primero se separan los becerros de las vacas, se bañan, mientras que en la cocina además de la birria y los frijoles se está meneando la leche cocida, que lleva leche bronca, masa, piloncillo y canela. Cuando los becerros están listos para ser herrados, se elige a uno para introducirlo en la cocina y hacerlo a toda costa que brame. Cuando lanza su grito entonces es bañado en leche cocida fría, en el cuello, cuerpo y cola, no sólo a él, sino a la persona que lo está maneando también. Se alza la algarabía, inicia la música y todos conviven compartiendo birria, frijoles, arroz, tortillas y por supuesto, leche cocida de postre. “Si no hay leche cocida, no hay herradero”.

Estas son tradiciones y platillos que se están perdiendo. Convenzo a mi tía para que me enseñe a hacerla, la noto reticente. Después de que la hacemos entiendo el porqué, no es complicado, pero se necesita batir, batir y batir constantemente para que no se pegue, pero el olor a canela, leche y masa fundiéndose son un aliciente y mejor aún, tener en el paladar esa consistencia espesa endulzándolo, hace que todo valga la pena. La leche cocida se puede comer caliente en vasitos o taza, pero es más común colocarla en charolas o moldes extendidos, refrigerarla hasta que tome consistencia gelatinosa, entonces la parten y sirven en platos. Es muy refrescante.

Cooked milk tradition

I have been in Huajicori for several days and my cousins took me to a river with thermal waters. On our way back, my cousin Alondra said: “Look there is aunt Domitila!” Uf I had not seen her since my mother died. She is my mom´s cousin. We get down the car, meeting after so long was filled with tears, laughter, happiness, nostalgia, hugs and many memories.

After a moment, food had to show up and I asked her if she knew how to make cooked milk (leche cocida), because a friend´s mother who is from Tecuala had told me about it and in the meeting with the teacher one lady told me the following:

Cooked milk is a cow boy tradition during the branding season in October, when cows have deliver their calves, there is good quality grass after the raining season and there is plenty of milk. As an abundance celebration a gathering is organized called “fiesta de los herraderos”. Tradition dictates that calves and cows must be separated first, then washed, meanwhile in the kitchen birria and beans are cooking as the cooked milk is being stir. It has whole milk, corn dough, brown sugar and cinnamon. When calves are ready to be brand, one is chosen to bring into the kitchen and make him roar. Once he does it, he is cover in cold leche cocida, neck, back, tail, but not only the calf, also the person that is handling him! Then everyone shouts, the music begins and everyone gathers sharing birria, beans, tortillas and of course, leche cocida as dessert. The saying says: “There is not branding, if there isn´t leche cocida.”

This traditions along with the food are being lost. I finally convince my aunt to teach me how to do it, I can perceive she doesn´t really want to. After we prepare it I understand why. It is not complicated, but you need to never stop stirring, otherwise it would burn. But the smell to cinnamon, milk and corn dough melting are a relieve…even better to have in your palate, it makes all the effort worth it. It can be eaten hot in a cup or pour in a pan, let it cool, refrigerate and then cut it as if it was jelly. Very refreshing!